Muchos factores influyen al momento de escoger la trotadora perfecta, pero sin lugar a duda hay características claves que todo comprador debe tener en cuenta para que la experiencia de uso termine siendo lo que se deseaba o esperaba.

Espacio de Trote (cinta / banda)

Algo quizás no muy considerado por personas que nunca han usado trotadoras, es la importancia del espacio disponible para moverse. Para efectuar un correcto movimiento y estar exento de caídas, tanto sea para caminar, trotar o correr, es necesario contar con el espacio suficiente para lograrlo.

A continuación, un ejemplo del ancho y largo a tener en cuenta de acuerdo al tipo de uso:

Ancho:

• 50 cm para caminar y trote suave
• 55 cm para trote normal y correr

Largo:

• 125 cm para caminar
• 140 cm para trotar
• 150 cm y más para correr y personas altas

Fuerza de Motor

Sin duda alguna, lo más importante a tener en cuenta debe ser el motor. Sin un buen motor que sea capaz de seguir el ritmo que se quiera, lo esperable es que en un par de meses terminemos viendo que el motor se habrá quemado.

Para ello, una regla simple y básica para saber escoger la capacidad del motor es de acuerdo a su tipo de uso:

• Caminata lenta: 1 a 1.5 HP
• Caminata normal/rápida: 1.5 a 2 HP
• Trote: 2.5 a 3 HP
• Correr: 3 HP hacia arriba

Importante a tener en cuenta es que, siempre debe buscarse la capacidad “continua” de trabajo, ya que muchas veces se menciona el “peak”, y este no refleja la realidad de uso. Lamentablemente no todas las marcas lo mencionan, pero de no decirlo, una buena regla es restarle al “peak” al menos 1 HP para tener una idea de su capacidad “continua” de trabajo.

Funcionalidades o características extras a considerar

Además de las mencionadas, existen otras opciones que pueden distraer al comprador al momento de la elección de una trotadora y que pueden terminar afectando las expectativas de uso. A continuación, algunas que se deberían tener en cuenta:

• Capacidad de peso: Quizás es un aspecto no tomado muy encuenta, pero es de suma importancia, ya que afecta al rendimiento y correcto uso, como también a una duración prolongada de la máquina. Comúnmente el rango varía entre 100 y 150 KG. Idealmente, deberías escoger una que al menos soporte 20 KG más que tu peso, de esta manera ayudaras a no sobrecargar el motor y dañarlo con el tiempo.
• Inclinación: Una gran funcionalidad a tener en cuenta dado a múltiples beneficios dentro de los cuales están: quemar calorías más eficientemente, reduce la carga de las articulaciones y puedes enfocar el esfuerzo en algún grupo muscular específico.
• Parada de emergencia (auto-stop): Algo no menos importante, incluso para los más avanzados, es un clip de color rojo que traen casi todas trotadoras hoy en día, el cual permite detener la trotadora de manera inmediata en caso de desconectarse del imán al que está unido. De suma utilidad tanto si tienes problemas de salud o si quieres exigirte al máximo y quieres evitar accidentes.
• Amortiguadores: Una de las grandes ventajas de correr en trotadoras, en vez de un pavimento duro, es la capacidad que tienen de proteger las articulaciones del impacto que significa el trote, el cual se reduce entre un 15 y 40%. Por lo que fijarse que traigan incorporados algún tipo de amortiguador (tanto sea de tipo resorte o acolchado) es algo que se debe revisar.
• Velocidad: Dependiendo del objetivo de compra, quizás este aspecto no sea de relevancia, pero si lo que buscas es algún tipo de entrenamiento orientado a maratones, entonces debes buscar una trotadora donde se señale que puede rendir al menos 15 km/h continuos (no peak).